jueves, 29 de junio de 2017

Ruta Mitologica por Zeanuri

El Gizotso (Hombre Lobo) es un ser considerado como monstruo - mitad hombre y mitad lobo- que habita en parajes selvaticos y que a veces hace su aparicion de noche cargado de cadenas.

En un lugar denominado "Aginao" vivia una mujer. Desde la Ermita de Urkia vieron que el Gizotso venia de Bidarbineta y gritaron a la mujer:

"¡¡La de Aginao!!...Apresurate!!...porque viene el Gizotso!!"

Dirigiose la mujer hacia su casa, pero el Gizotso se le adelanto y le arranco los pechos.


Para siempre desapareceria , asimismo , una pastora de Zeanuri que habia apacentado aquella tarde sus ovejas en los pastos de San Justo, cuando , sorprendida por una fuerte tormenta , se le hizo de noche en el monte. Despues , cuando caminaba de regreso a casa, oiria en dos momentos distintos como una extraña voz la llamaba por su nombre.
Volveria a escucharla por tercera vez cuando estaba junto a Bustintzuri.
En esta ocasion la voz procedia del kalero u horno de San Justo y al instante seria tragada por la tierra. Segun se dijo , su desaparion fue cosa de Lamias.


Segun leyendas de Zeanuri, las lamias tenian costumbre de peinarse sentadas sobre una peña, a la orilla de "Lamiñaposu" o Pozo de las Lamias. Cuando se acercaba alguna persona , precipitadamente se introducian en las aguas.
Una vez , la hija de la señora del molino de Lambreabe pasaba por aquel sitio y vio como las Lamias que estaban peinandose , se echaron al agua, dejando un peine de oro en la orilla del pozo. La hija de Lambreabe recogio el peine y lo llevo a casa. Las Lamias fueron a Lambreabe y pedian su peine diciendo;
"Señora de Lambreabe, deme mi peine , si no ,acabare su linaje".
Otra vez , la señora del molino de Lambreabe compro una sabana y la puso extendida junto a Lamiñaposu . Las Lamias consideraron como suya esa sabana, cuando vio que estaba seca y bien aireada, las Lamias siguieron diciendo;
"Señora de Lambreabre, deme mi sabana, si no , acabare su linaje".





Otra leyenda nos habla de la señora de la casa de Iturriaga, la cual fue al lugar llamado "Lamiñategieta" y encontro alli a una Lamia peinandose y le dijo;
"Señora, muy temprano anda usted peinandose"
Al oir esto, la lamia salto a una sima , dejando alli el peine de oro.
La señora de Iturriaga tomo el peine y lo llevo a su casa. En una de las noches siguientes se le presento la Lamia y poniendose junto al caserio le dijo;
"Señora de la casa, dame mi peine; de lo contrario, te quitare la capa de los sesos".
La señora le invito a que metiera la mano por debajo de la puerta, y asi se lo daria.
La Lamia metio la mano y la señora se la corto con un hachazo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario